Una niña brasileña de dos años ha muerto de manera trágica después de electrocutarse al tocar un cargador de teléfono móvil. El fatal incidente tuvo lugar el pasado lunes en el municipio de Erere en el estado de Ceará, en el noreste del país.
Sara Alves de Albuquerque, de 2 años, fue trasladada al hospital en estado crítico tras recibir una descarga eléctrica del cargador del teléfono móvil. Los médicos lucharon para salvar su vida, pero la pequeña murió poco tiempo después. La Policía ha abierto una investigación para esclarecer el fallecimiento.
El Ayuntamiento de Erere emitió un comunicado en el que expresa su “profundo dolor” por la muerte de la joven. “En este momento de profundo dolor, la administración pública municipal expresa su solidaridad con su familia y amigos, y expresa su más sincero pésame por esta indescriptible pérdida”.
Solo en 2020, Brasil registró 355 muertes por descargas eléctricas.