Según un portavoz de los guardacostas citado por la agencia de noticias Reuters, 14 personas han sido rescatadas con vida tras el naufragio, ocurrido al este de la capital de Libia, Trípoli.
La oficina de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Libia, por su parte, ha asegurado en Twitter que ha prestado ayuda a "16 supervivientes traumatizados". "No sabemos todavía cuántos personas están desaparecidas", ha añadido.
Por otra parte, la Guardia Costera ha interceptado a otros 200 migrantes y refugiados que viajaban a bordo de dos embarcaciones también al este de Trípoli. La OIM estima que más de 7.000 personas han sido devueltas por los guardacostas libios este año.
En lo que va de 2018, al menos 972 migrantes y refugiados se han ahogado en el Mediterráneo, con 635 víctimas solo en la ruta hacia Italia. Además, otras 292 personas han perecido intentando alcanzar las costas españolas, según las estadísticas de la OIM.
En total, el número de llegadas ronda ya las 45.000, también en este caso con Italia como el primer país de la lista. España figura en segunda posición tras superar a Grecia al registrar unas 15.000 llegadas.
Médicos Sin Fronteras (MSF) ha lamentado en Twitter la muerte de "al menos cien personas vulnerables" y ha advertido de que "destruir la capacidad de búsqueda y rescate de las ONG en el Mediterráneo sólo llevará a más muertes innecesaria en el mar". "El coste de vidas humanas es atroz", ha remachado la ONG.