El coronavirus deja ya más de 52,1 millones de casos en el mundo y cerca de 1,3 millones de muertes según cifras de la Organización Mundial de la Salud. La covid-19 no da tregua, y múltiples países europeos, entre ellos España, han marcado máximos y récords absolutos en esta segunda ola que amenaza con mostrarse implacable con el invierno en el horizonte más inmediato. Con la transmisión disparada, el SARS-CoV-2 sigue haciendo estragos, poniendo al límite los distintos sistemas sanitarios. Sin embargo, todavía hoy, –cuando ya llevamos más de 11 meses comprobando los dramáticos efectos del virus en uno y otro rincón del planeta, desde que se extendiese desde su epicentro en Wuhan, China–, existen, contra toda lógica, numerosos negacionistas de la pandemia; personas que consideran que todo esto es una invención, o que simplemente deciden voluntariamente ignorar lo que sucede, permaneciendo ajenos a una emergencia sanitaria y una crisis sin precedentes.
Frente a esto último se rebela el médico italiano, jefe de reanimación del hospital de Rivoli, en Turín, Michele Grio, quien a través de una publicación en Facebook ha querido hacer uso de la ironía para invitar a todos esos negacionistas a un “tour guiado” por las plantas covid del hospital para que conozcan verdaderamente el horror y el dolor que el coronavirus provoca.
“No, no está todo vacío. Hice que los médicos y los enfermeros se tumbaran solo para hacer las fotos. No dormimos porque vamos hacia adelante con la edad y pasamos los días sentados, comiendo y bebiendo. ¿No lo creéis?”, arranca su mensaje, cargado de un citado tono irónico que se apresura a evidenciar en la publicación, por si tras leerla alguno tiene dudas de que lo que está diciendo, precisamente, es que la saturación de los hospitales es tal que no pueden parar un segundo y las jornadas les llevan a la extenuación.
“Bueno, el TourinGrio organiza a partir de mañana tours guiados en el área de Reanimación y en los departamentos Covid: será para mí un placer guiaros personalmente en un viaje muy agradable en lo que para nosotros es dantesco pero para vosotros es exagerado. Ah, y se me olvidaba, llevo traje, mascarilla y calcetines. Ustedes no lo necesitan, pero mantengo libre una cama con ventilador mecánico y monitoreo continuo”, prosigue, antes de finalizar: "No te hagas el cobarde, son todo ‘porquerías’, ¿no?"
Tras sus palabras, el médico acompaña efectivamente el mensaje con una fotografía en la que se aprecian las camas del hospital con un grupo de sanitarios al fondo, pertrechados de arriba abajo con sus EPI, –sus equipos de protección individual–, para cuidar a los pacientes y hacer frente a la pandemia.
Italia está pulverizando el récord diarios de contagios. Si este jueves era de 37.987 nuevos positivos y 636 muertes por covid-19 en las últimas 24 horas, este viernes las cifras hablan de 40.902 nuevos casos y 550 nuevos decesos.
Solo durante este mes, los fallecidos en el país transalpino se elevan más allá de los 10.000, mientras los sanitarios alzan la voz para pedir cierres que ayuden a combatir el colapso frenando la transmisión. A punto de quedarse sin camas en los hospitales, las UCI están al límite. Esta semana, la imagen de un anciano muerto de covid en un baño de urgencias es el vídeo de la vergüenza que ha conmocionado a Italia y ha sobrecogido a todos más allá de sus fronteras.