Diego Armando Maradona, el máximo ídolo del fútbol argentino, fue operado con éxito de un hematoma subduralen su cabeza y ya descansa en su habitación, según informa su jefe de prensa, Sebastián Sanchi, en Instagram.
La operación se realizó en la Clínica Olivos, ubicada en la Provincia de Buenos Aires, al norte de la capital argentina. Allí, mientras los doctores asistían al 'Diez', centenares de fanáticos se acercaron hasta las puertas del hospital para expresarle su apoyo al ganador del Mundial de 1986.
Antes, Maradona estaba ingresado en el Sanatorio Ipensa de la ciudad de La Plata, al sur de la capital. En ese lugar le detectaron la anomalía, que podía poner en peligro su cerebro. Por ello, se llevo a cabo su traslado, y la ambulancia fue acompañada por una caravana de simpatizantes 'maradonianos', que la persiguieron durante varios kilómetros.
El actual entrenador del club Gimnasia y Esgrima de La Plata estuvo acompañado por su médico personal, Leopoldo Luque, quien coordinó la cirugía. En medio de la incertidumbre generalizada por el estado de salud del 'Pelusa', ese doctor ya ponía paños fríos antes de la operación: "Diego está lúcido, comprende, está de acuerdo con la intervención. Es una cirugía de rutina".
El médico también detalló cómo notaron este problema en la cabeza de Maradona: "En uno de los estudios de rutina, observamos que tiene un hematoma subdural, que se forma entre el cerebro y la meninge exterior. Le habíamos realizado la tomografía hace un mes y por suerte decidimos repetirla".
Según Luque, es muy pronto para determinar cómo se originó el daño, ya que "los golpes de este tipo son imperceptibles y los pacientes no suelen recordarlos". Según fuentes cercanas, podría deberse a un traumatismo leve, que pudo haber sufrido boxeando –actividad deportiva que practicaba–, un pelotazo o hasta cuando se cayó para atrás en el banco de Gimnasia el torneo pasado.
Así, al concluir su labor, el médico salió de la clínica para trasladar tranquilidad a la población: "La cirugía duró una hora y 20 minutos, se pudo evacuar el hematoma de manera exitosa. Diego está despierto, está todo muy bien", afirmó. Asimismo, adelantó que "va a quedar en observación", pero celebró que "está lúcido". No obstante, aclaró que su salida dependerá de cómo evoluciona el paciente.
En cuanto a los familiares, una de sus hijas, Dalma Maradona, tras salir del centro de salud agradeció desde Twitter "las muestras de amor constantes": "¡Gracias a todos los que rezaron por él!", enfatizó.
El exjugador nacido en el humilde barrio de Villa Fiorito, Provincia de Buenos Aires, había sido ingresado el lunes, tras estar "débil", según dejó trascender su círculo cercano. El viernes, al cumplir 60 años, fue homenajeado por Gimnasia, su actual club.
Sin embargo, se le vio cansado y solo participó del evento en el estadio algunos minutos, algo que despertó preocupación. Horas más tarde, la noticia de su malestar conmocionó a la sociedad argentina.