Karen Robinson, la madre de un chico de 15 años que se quitó la vida después de haber sufrido acoso a través de las redes sociales, cuenta la historia de su hijo para tratar de concienciar a la sociedad y sobre todo a los adolescentes de los peligros del acoso escolar.
Jack Parker fue encontrado muerto en un bosque cercano a su casa el pasado 28 de julio, hace casi un año. Pocos días antes, según la investigación en la Corte Forense de Bolton, se había iniciado una serie de especulaciones "sin fundamento" a través de las redes sociales sobre el joven.
Su madre también llegó a recibir mensajes amenazantes a través de la red social Snapchat, algo que ella asegura tuvo relación directa con la muerte de su hijo.
Jack tenía "una serie de preocupaciones" en el periodo previo a su muerte, según se señaló en la audiencia. Además, había acabado su relación con la que era su novia por el momento. Según señala la investigación, el joven había preguntado a un amigo dónde podía encontrar antidepresivos.
"Él solo solía decir 'algunas cosas de las que puedo hablar contigo, mamá, y algunas cosas de las que no puedo", comentaba su madre, según recoge Manchester Evening News.
La noche del suceso, la madre del menor y su pareja salieron a celebrar su aniversario de bodas. Karen invitó a su hijo a ir con ellos, pero este se negó. "Le hice un chocolate caliente y se lo llevé. Le dije que lo amaba y me dijo que él también me amaba a mí. Eso fue lo último que dijo", comenta.
Durante la cena, la mujer recibió un mensaje de la exnovia del joven en el que decía que estaba preocupada por él. Acto seguido la madre acudió de inmediato a su domicilio, donde el menor ya no estaba. Esa misma noche encontraron su cadáver en un bosque cercano.
Ahora, casi un año después de su muerte, su madre cuenta su historia para intentar concienciar a la sociedad sobre el acoso en redes: "Solo quiero que los jóvenes hablen", asegura. "Es demasiado fácil enviar mensajes desagradables, especialmente en Snapchat. No hay pruebas. Simplemente desaparece", lamenta.
Para terminar, desea que quien estuviera acosando a su hijo haya aprendido la lección: "Espero que quienquiera que lo estaba acosando tenga conciencia y aprenda de esto y no se lo haga a nadie más".