La pequeña Alba no tenía la edad suficiente para ser vacunada contra esta enfermedad, la primera dosis se administra a los 12 meses. Ha estado luchando contra este virus sin inmunidad. Según recoge The Sun, para los padres de Alba ha sido muy difícil publicar estas imágenes de su hija enferma, debatiéndose entre la vida y la muerte pero creen que es la única manera de crear conciencia sobre el peligro de la propagación de este virus.
"No podía abrir los ojos, necesitaba oxígeno, ha estado ocho días alimentándose por sonda, tenía mucha fiebre y erupciones por todo el cuerpo" ha explicado su madre, quien decidió llevarla al hospital cuando observó que el cuerpo de la niña se había quedado flácido, no respondía a sus estímulos y tenía fiebres altas; fue allí donde tras descartar otras muchas enfermedades le detectaron sarampión.
"Nos preocupamos por el futuro y los efectos adversos", "su tos sigue siendo muy grave, por lo que será vigilada para asegurarse de que no haya riesgo de neumonía" "Todo podría haberse evitado si se vacunara contra el sarampión a todos los niños" afirma Jilly.
Los casos graves de sarampión pueden provocar encefalitis, daños cerebrales, graves, ceguera o incluso la muerte. La OMS (Organización Mundial de la Salud) ha alertado del aumento de casos de sarampión en el mundo, en el último años se ha registrado un aumento del 300% y todo apunta a que una de las causas es la decisión de los 'antivacunas' de no vacunar a sus hijos.
¿El sarampión es solo el principio? Los efectos colaterales de no vacunar