El 3 de mayo de 2007, hace ya 13 años, la vida de la familia McCann se truncó para siempre. Mientras pasaban sus vacaciones en un resort en Praia da Luz, en Algarve, al sur de Portugal, la pequeña Madeleine desapareció y su caso todavía sigue sin resolverse en la actualidad.

En todo este tiempo ha habido numerosas hipótesis y teorías. Se habló de que podría haber sido un secuestro llevado a cabo por una red de trata de menores. También se barajó la idea de que hubiese sido víctima de un pederasta local, e incluso se comenzó a investigar a los padres y a los amigos por si podrían haber estado relacionados con la desaparición de la menor.

Aquel año la familia, procedente de Leicester, en Reino Unido, se desplazó hasta Portugal para pasar unos días de vacaciones. Al llegar se alojaron en Ocean Blue, de Praia da Luz, un complejo turístico que tiene diferentes apartamentos y cabañas para los visitantes.

Los padres y sus tres hijos, Madeleine, de cinco años, y los dos meliizos, Amelia y Sean, de dos, se alojaron en el complejo donde también se encontraban otras parejas con hijos amigos de la familia, según recoge Infobae.

Los adultos solían dejar a los menores durmiendo en sus habitaciones y se iban a tomar algo por la zona de restauración del lugar. Cada poco tiempo, alguno de los adultos iba a vigilar que todos se encontraban en perfecto estado.

Esta actitud la mantuvieron durante todas las vacaciones, pero el 3 de mayo, cuando sucedieron los hechos, Kate McCann fue a comprobar cómo estaban sus hijos y descubrió que la pequeña Madeleine no estaba.

Una misteriosa 'mujer de púrpura'

Desde que sucedieron los hechos se iniciaron numerosas investigaciones sin resultado por la Policía de Portugal y por Scotland Yard. En los últimos años se han escuchado numerosos testimonios, como el de Jenny Murat, de 79 años, que asegura que vio aquella noche de 2007 una misteriosa 'mujer de púrpura', rondando el apartamento turistíco en el resort del Algarve, muy atenta de lo que sucedía, una mujer que se convirtió en sospechosa del caso pero de la que no se logró recabar más información.

Fia Johansson, una experta en desapariciones que ha trabajado con los servicios de investigaciones de EEUU en casos de desaparecidos, aseguró que la niña británica estaría sana y salva viviendo con una familia alemana.

Según esta experta portuguesa, Madeleine habría sido secuestrada por una mafia de trata de menores de la que logró escapar y actualmente estaría viviendo con una familia de acogida sin saber nada de su verdadera identidad.

El mismo año de la desaparición, desde la línea de investigación se señaló a los padres de la menor como posibles involucrados en la desaparición. Según esta hipótesis, ambos médicos habrían suministrado una dosis de sedante que acabó con su vida, y después habrían escondido el cuerpo de la niña.

Esta hipótesis ha sido descartada en todo momento por los progenitores, pero en estos 13 años no han dejado de estar en el punto de mira de las investigaciones y de las teorías, que siguen sin aportar ninguna pista clara sobre el paradero de Madeleine McCann.