Comienzan a cuestionar a la policía británica por la lentitud en las labores de identificación tres días después de los atentados en el puente de Londres. Las familias de al menos cinco personas, que están desparecidas, esperan con angustia la demora de los trabajos de los forenses. Solo han transcendido los nombres de tres de las siete víctimas mortales, entre ellos hay un camarero británico, una voluntaria canadiense y una sanitaria australiana.