La jueza Rosemarie Aquilina, que había permitido la palabra en su sala de audiencias a todas las jóvenes que querían dirigirse directamente a Nassar, y le obligó a escuchar cuando él le suplicó que parara, le entregó la sentencia y le dijo, tal y como indica el The New York Times.
"Es un honor y un privilegio sentenciarlo", ha continuado explicando, agregando que "acabo de firmar su sentencia de muerte". "No te mereces salir nunca más de la cárcel", ha subrayado Aquilina, frente a unas víctimas que apenas podían contener la emoción.
A lo largo de siete días, unas 160 víctimas han brindado testimonios que dan cuenta de los actos de abuso y acoso cometidos impúnemente durante años por Nassar, que ha dicho disculparse poco antes de la lectura de la sentencia. "Llevaré vuestras palabras conmigo el resto de mis días", ha dicho a sus víctimas.
Otro de los enfrentamientos del acusado y la juez se vivió cuando esta leyó en alto una carta en la que el médico argumentaba que era un buen profesional y que había sido "manipulado" para reconocer los delitos. Para Aquilino, esta carta evidencia que Nasser no ha asumido aún sus actos --"te enviaría a mis perros"--.y por este motivo la arrojó con evidente desprecio al término de la lectura.
Nassar, de 54 años, ya había reconocido en noviembre su culpabilidad de cargos de abuso sexual en primer grado en el condado de Ingham, donde ha escuchado este miércoles la dura sentencia contra él. Aún tiene pendiente otro proceso en el condado de Eaton por tres cargos más y ya cumple una pena de 60 años de cárcel por posesión de pornografía infantil.
Tras tener que escuchar los testimonios de algunas de las chicas de las que había abusado, Nassar - o el ‘Monstruo de Míchigan’ como se le conoce- el médico en un primer lugar se declaró culpable de haber abusado sexualmente de siete menores cuando era el médico del equipo y de la Universidad de Michigan el pasado 23 de noviembre. Pero esa cifra ha aumentando hasta superar las 150.
Entre sus víctimas está Gabby Douglas, oro olímpico de los Juegos de Río de Janeiro del año pasado. Es la última de una larga lista de más de 150 mujeres que le han denunciado por agredirlas sexualmente una vez destapado el escándalo. Larry Nassar, 54 años, se mostró arrepentido ante el tribunal y dijo que reza todos los días por el perdón de sus víctimas.
Pero la juez del caso asegura que utilizaba su posición de confianza frente a las niñas de la manera más vil porque las agresiones sexuales se producían bajo el pretexto de tratar médicamente a las menores en su casa o en una clínica del campus universitario.
El escándalo propició que tres directivos de la Federación estadounidense de Gimnasia dimitierande Gimnasia dimitieran salpicados por los abusos sexuales de Nassar. El exmédico del equipo nacional continúa escuchando una por una las declaraciones ante juez de las 140 mujeres, niñas por aquel entonces, que le han denunciado. Finalmente pasará como mínimo 40 años en prisión y como máximo 175.