El crudo relato de Karl-Anthony Towns, una de las estrellas de los Minnesota Timberwolves, equipo de la NBA, conmovió al mundo del baloncesto hace unos meses. El jugador dominicano-estadounidense sufrió la pérdida de su madre y seis familiares a causa de la covid19. Sin embargo, lejos de rendirse, participó en la pretemporada junto a sus compañeros y el pasado 23 de diciembre regresó oficialmente a la competición.
Towns decidió llevarse el balón del encuentro entre los Minnesota Timberwolves y los Detroit Pistons en memoria de su madre Jacqueline Cruz-Towns, quien murió el pasado 13 de abril a los 58 años de edad. Tras lo sucedido, el jugador sorprendió con una dura declaración: "Ese Karl murió el 13 de abril y no volverá. Estás hablando con el yo físico... Ese hombre del que estás hablando del 13 de abril o antes, no lo conozco. Él se quedó allí", respondió tras ser preguntado sobre los últimos meses.
La situación de Towns comenzó a hacerse viral en redes sociales a finales de marzo, cuando anunció entre lágrimas el ingreso de su madre por covid. "Su fiebre no bajaba y estaba muy incómoda. Además sus pulmones estaban cada vez peor, su tos también empeoraba y tenía problemas para respirar, por eso la tuvieron que poner un respirador", reveló en aquel momento la estrella de la NBA.
Semanas después se confirmó el fallecimiento de su madre y también el de su tío por la misma enfermedad. "Siento que la vida me ha endurecido y humillado. Vi muchos ataúdes en los últimos siete meses. Soy yo quien busca respuestas para tratar de mantener a mi familia bien informada y tomar todas las medidas necesarias para mantenerla con vida", señaló el jugador en declaraciones a ESPN.