La violencia contra las mujeres sigue siendo "la violación de los Derechos Humanos "más extendida en el mundo y la menos reconocida", ha denunciado la ONG. "La violencia prevalece en las calles de Ranchi, capital de Jharkhand, India, y el acoso sexual, en particular, es un riesgo del que toda niña es muy consciente", ha subrayado.
Con su programa, World Vision ha estado trabajando con 20 niñas en India para que aprendan autodefensa con el objetivo de desarrollar resiliencia y confianza. "De este pequeño grupo de niñas pioneras, 6 de ellas ya han conseguido su cinturón negro, reconocimiento que denota una alta competencia en el arte marcial", ha destacado la ONG.
"Inicialmente arrancamos este proyecto con técnicas para caminar en grupo, de modo que si una persona no podía defenderse, pudiéramos hacerlo como grupo, pero ahora estamos tan seguras de nosotras mismas que también podemos caminar solas", ha contado Yamini, una de las karatekas del grupo.
En Jharjand (India), las mujeres constituyen el 48,64 por ciento de la población total del estado, con 16 millones (incluidas las niñas) y una tasa de alfabetización femenina de tan solo el 56,21 por ciento. En este estado indio, el 17,8 por ciento de las mujeres se casan antes de cumplir los 18 años.
Tras denunciar que en Jharjand los casos de violencia han aumentado en 211,17 por ciento en el periodo que va de 2007 a 2017, World Vision ha subrayado que el aumento de la violencia y el crimen contra las mujeres es "una preocupación seria" en este estado.
"Cuando las niñas salen de su casa son molestadas constantemente. Los niños se rozan con ellas con cualquier excusa o las agarran de las manos, por lo que los padres están preocupados por la seguridad de sus hijas cuando salen a la calle", ha afirmado Deepa, líder de este grupo de autodefensa en Ranchi.
El proyecto de defensa personal comenzó con clases a un grupo pionero de 20 niñas y ahora ofrece clases de kárate a todas las niñas cuyos padres acuden pidiendo ayuda porque no están cómodos permitiéndoles salir de sus casas, incluso para ir a la escuela.
World Vision ha explicado que cada vez que las niñas encuentran tiempo para enseñar lo básico aprovechan la oportunidad para "empoderar" a otras menores con su entrenamiento personal.
"Este grupo de niñas es una forma innovadora y llamativa de involucrar a las menores, ya que les presentamos el reto de aprender cosas nuevas mientras se sienten seguras. A través de estos programas podemos educar a las niñas. Por lo tanto, no se trata solo de defensa personal, se trata de un futuro mejor", ha concluido Deepa.