James Lawton, un hombre de 27 años, ha sido condenado a cadena perpetua tras ser declarado culpable del asesinato de su hijo Colby, de solo cuatro semanas, en su casa de Newbury, Reino Unido.
Los hechos se remontan al 9 de mayo de 2020, cuando James Lawton, en estado ebrio, sacudió tan fuerte al pequeño Colby Lawton que este sufrió daños en el tronco cerebral, que le provocaron una parada cardiorrespiratoria. Además, el niño, presentaba una lesión cerebral. Aproximadamente, una hora y media después de lo ocurrido, declararon su muerte en el Royal Berkshire Hospital.
Al parecer, no era el primer episodio violento de James Lawton contra su hijo, que a sus cuatro semanas de edad sufrió su agresividad y sus impulsos, tal y como se reveló en el juicio que se celebró en los juzgados de Reading. Al menos habría sido agredido en otras dos ocasiones, según informó en un comunicado la Policía de Thames Valley.
De hecho, el pequeño, según se informó durante el juicio, presentaba 50 fracturas en el cuerpo, una en el cráneo, 70 hematomas y signos de estrangulamiento parcial antes de su muerte. La lesión cerebral del pequeño eran comparables a las sufridas en un accidente de tráfico a más de 140 km/h.
“Durante las últimas cuatro semanas, el jurado ha escuchado cómo un bebé indefenso, de solo un mes, había sufrido las heridas más terribles a manos de su padre James Lawton”, señaló el inspector jefe detective Stuart Blaik, de la Unidad de Delitos Mayores de la Policía de Thames Valley, añadiendo que “Lawton negó haber causado daño a Colby, pero el jurado ha visto a través de sus continuas mentiras y lo ha declarado culpable hoy de su asesinato.
Lawton fue acusado de los cargos de asesinato y de lesiones corporales graves el 25 de mayo; mientras que la madre del pequeño, Chantelle Stroud, de 25 años, fue acusada el 29 de junio de causar o permitir la muerte del niño y de crueldad hacia el niño.
El viernes 26 de noviembre, James Lawton fue declarado culpable de los cargos y condenado a cadena perpetua con un tiempo mínimo de 17 años; mientras que Chantelle Stroud fue declarada inocente de todos los cargos.