La energía que desprende la reina Isabel II de Inglaterra a sus 94 años queda más que evidenciada cada día que pasa. Recientemente se le ha podido ver al volante de su Land Rover dando una vuelta por la campiña de Norflok.
Las imágenes han salido el mismo día que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha descartado identificar mediante una placa con una 'M' a los conductores mayores de 70 años, una propuesta de la Fiscalía de Salamanca. "En lo que estamos nosotros de acuerdo es en lo que se está haciendo y se está trabajando y es que la persona que tiene en vigor una licencia para conducir un vehículo se encuentre en las capacidades psicofísicas necesarias e imprescindibles para no ser un riesgo en la conducción, independientemente de la edad de esa persona", ha insistido el ministro.
En la actualidad y debido a la pandemia del coronavirus, el Palacio de Buckingham anunció que este año no se realizarán eventos en Londres, se encuentran aislados en la campiña con especial cuidado para proteger la salud de la reina, después de que haya habido varios positivos en la familia.
Con gafas de sol y un pañuelo de mariposas en la cabeza, se ha podido ver a la reina disfrutando de la conducción en medio del paisaje inglés de la finca de Sandringham. Isabel II disfruta conduciendo y parece gozar de grandes reflejos pese a sus 94 años.
Los trabajadores que rodean a la reina deben seguir un estricto control y crear así un entorno ‘burbuja anti-covid’ para que el virus no afecte a la reina, quien a pesar de contar con un buen estado de salud, la edad la convierte en población de riesgo de sufrir las consecuencias más graves del coronavirus.
El Gobierno de Reino Unido ha elaborado una propuesta para establecer un baremo claro a partir del cual endurecer en Inglaterra las restricciones frente a la pandemia de coronavirus, después de que en las últimas horas se hayan anunciado nuevas medidas en localidades como Liverpool, Warrington, Hartlepool y Middlesbrough.
El Ministerio de Sanidad ya adelantó en septiembre que quería establecer una serie de criterios que finalmente han quedado plasmados en una propuesta a la que ha tenido acceso la BBC. Según este documento, que será entregado a las autoridades sanitarias, el punto de inflexión estará en los 100 casos de covid19 por 100.000 habitantes.
Si los contagios se disparan, el Gobierno prevé confinamientos, si bien deja claro que los centros educativos y los negocios esenciales estarán excluidos y permanecerán por tanto abiertos.