Incertidumbre y preocupación entre españoles residentes en EEUU por la reapertura de las fronteras exteriores de Europa

  • La UE negocia contra reloj la lista definitiva de países que podrán acceder al bloque comunitario. Estados Unido, entre los posibles países vetados

  • “El 80% de los pasajeros que ha adquirido billetes para viajar a España, están intranquilos”

  • “Hasta que no esté en el avión y haya aterrizado en Madrid, no me lo voy a creer”

Entre la incertidumbre, la impotencia, la desesperación, la preocupación, y también resignación. Así es como muchos españoles residentes en Estados Unidos están viviendo las noticias que les llegan acerca de la reapertura de las fronteras con Europa para poder seguir adelante con sus planes inminentes para viajar a España.

La previsión era, tal y como había propuesto la Comisión Europea, que a partir del 1 de julio se levantaban los vetos implantados a una serie de países, debido a la pandemia del coronavirus. Pero, a una semana del momento de la reapertura, la Unión Europea comenzó a ultimar una lista de países “insuficientemente seguros” para que sus ciudadanos puedan acceder al bloque comunitario.

El principal objetivo de la UE es evitar que los posibles casos importados provoquen un rebrote en el viejo continente, donde la expansión del virus parece limitada. El grupo de los 27 acordó el viernes aplicar un criterio epidemiológico común a la hora de abrir las fronteras a aquellos países con un nivel de contagio similar o inferior a la media de la UE. Otra condición clave es si el país tiene una prohibición de ciudadanos de naciones europeas.

Tras varias reuniones contra reloj, el sábado se ha dio a conocer una primera lista de 15 países considerados seguros, que contemplan el ingreso de viajeros entre los que se encuentran Tailandia, Australia, Nueva Zelanda, Georgia, Uruguay, Canadá y China.

En un principio, cumpliéndose las sospechas de los últimos días, y teniendo en cuenta el elevado número los casos de contagio por coronavirus, Rusia y numerosos países de Latinoamérica, así como Estados Unidos, quedarían vetados.

Pero las noticias que llegan a los españoles que viven en Estados Unidos no están claras. Las compañías aéreas no les dan respuestas y a las agencias de viaje apenas les llega la información.

“Si no podemos viajar los cuatro, cancelamos todos”

Si no podemos viajar los cuatro, cancelamos todos“Está siendo todo una locura”, asegura desde Miami la empresaria Ana Hernández, quien tiene planificado un viaje a España con su marido y sus dos hijos pequeños de 6 y 7 años para el próximo 2 de julio: “Mis hijos y yo podemos volar en principio, eso creemos, pero mi marido es estadounidense y no sé si le van le van a permitir entrar. A unos amigos que viajaban en el mismo avión que nosotros, les han llamado para decirles que los reubicaban en el vuelo del día 30, pero la agencia de viajes con la que lo he cerrado, de momento me dice que nuestro vuelo sigue abierto. Hemos decidido que si no podemos viajar los cuatro, cancelamos todos”.

Ana quiere ir a ver a su familia en Santa Marta, Badajoz. Hace más de un mes, cuando supuestamente se había superado el pico de la crisis sanitaria en Florida, y con el coronavirus más controlado en España, decidieron comprar los billetes de avión. Según la última normativa, a partir del día 1julio ya no era necesario guardar cuarentena al llegar a su destino: “Nos hemos protegido muy especialmente estos últimos días, por prudencia en general y porque mi padre de 72, tiene problemas de salud. Queremos ir a verle con la tranquilidad de que no le vamos a contagiar”.

Sin embargo, en los últimos días, en el estado de la ciudad del sol, los casos por coronavirus se han disparado, registrando el viernes cerca de 9.000 nuevos contagios y 8.530 el sábado, alcanzando la cifra total de más de 141.000 afectados por la pandemia. En Estados Unidos hay más de dos millones y medio de enfermos por Covid-19, y más de 127.000 personas han perdido la vida.

Con menos días de margen para saber si podrá viajar a España, cuenta la también empresaria Cristina Montes, residente en Chicago, quien tiene tres billetes de avión directos a Madrid para el 30 de junio, para ella, su marido, y su hija de 12 años.

Desde enero Cristina tiene planificada una intervención ginecológica en la ciudad donde nació, La Coruña, pero ante las últimas noticias, le surgen muchas preguntas a corto, medio y largo plazo: “Es todo muy complicado, se suponía que la pandemia estaba más controlada, aquí y allí, eso nos decían. En principio, como españoles se supone que podemos viajar los tres, pero con los cambios de la Unión Europea, no tenemos claro que nos vayan a permitir entrar, que espero que sí, pero, ¿en qué fecha? Tengo una operación programada, y si tuviera que cancelarla…Tardarán meses en darme cita y no debo esperar mucho más tiempo por una cuestión de salud

“Mi vuelta está en el aire, no sé cuándo podré volver a mi casa”

En el caso de Cristina, se da un añadido y es que, aunque tiene billete de vuelta para el 15 de agosto, no sabe si podrá regresar a Estados Unidos en la fecha prevista: “Ya lo he hablado con mi abogada y está confirmado que la entrada sólo está permitida para los ciudadanos, para quienes tengan Green Card (residencia permanente), y algunos visados muy específicos, y el nuestro, no está entre ellos. Por eso, de momento, hemos descartado que venga mi marido, pero mi vuelta está en el aire, no sé cuándo podré volver a Chicago, y mi hija, si supiéramos que puede dar las clases online cuando empiece el colegio, se vendrá, pero, eso es otra interrogante a día de hoy”.

En el intento de despejar dudas, Cristina ha llamado insistentemente a la compañía aérea, pero no logra que le atiendan: “No me cogen el teléfono, y no sé si voy a perder el dinero de los billetes. El mío sí admite cambios, pero para el de mi marido y el de mi hija hay que avisar con 15 días de antelación. Mi hija lleva dos años sin ir a España, tiene muchas ganas de ver a toda la familia y me pregunta a cada rato. Intento tomármelo con filosofía, así que no haré la maleta a última hora, porque no las tengo todas conmigo para poder volar”.

“Hasta que no esté en el avión y haya aterrizado en Madrid, no me lo voy a creer”

Con las mismas dudas y preocupación lo vive la valenciana María Eugenia García: “Estoy a una semana para volar, ¡no quiero pensar que vaya a tener problemas!”, se pregunta angustiada desde Nueva York. “Hace un año que no voy a España. Intenté ir en marzo pero tuve que cancelarlo por cómo estaba la situación allí y aquí. Y ahora que ya estoy a punto, estoy cruzando los dedos para que no pase nada. Las noticias que me llegan son confusas, no está claro que los españoles podamos viajar. Hasta que no esté en el avión y haya aterrizado en Madrid, no me voy a creer que se haya resuelto”.

María Eugenia espera viajar el próximo 5 de julio para ver a su familia. Inicialmente tiene pensado regresar a finales de agosto pero, al igual que Cristina, no sabe con seguridad si podrá regresar a Estados Unidos en la fecha prevista. “A pesar de que trabajo en Nueva York, pago mis impuestos en Estados Unidos, vivo en este país desde hace 7 años… no sé si podré regresar a mi casa. Parece que cabría la posibilidad de volver por Canadá, pero todo puede cambiar de nuevo”.

“El 80% de los pasajeros que han adquirido billetes, están intranquilos”

Por su parte, Ana Lizcano, CEO de la agencia de viajes Billion Travel Solutions, con sede en España y en Estados Unidos, confirma la falta de información que tienen en estos días de cambio: “Desde que se nos informó que a partir de julio no habría restricciones con los vuelos, ha habido una gran demanda de peticiones y emisiones de billetajes de españoles que viajan a España. Cuando las compañías aéreas empezaron a promocionar su operativa, los vuelos se fueron llenando gradualmente a lo largo de los meses de julio y agosto. Tras la nueva información de Europa, la incertidumbre es máxima porque no sabemos si nuestros clientes podrán viajar, ni cuándo, ni si podrán hacerlo con sus familiares porque muchos de ellos tienen mujeres, maridos e hijos que nos son españoles, y no saben si podrán acompañarlos. Muchos tampoco saben cuándo podrían regresar, en función del tipo de visado que tengan. Estamos a la espera de las noticias de los gobiernos y de las compañías aéreas”.

El teléfono en la agencia, no para de sonar: “El 80% de los pasajeros que han adquirido sus billetes están intranquilos y llaman cada día para intentar saber qué va a suceder, pero hasta que no sepamos las restricciones reales, no podemos hacer nada porque no tenemos ningún comunicado oficial, con el contratiempo de que la mayoría vuela entre el 1 y 15 de julio, es decir, ya mismo. Lo que sabíamos hasta ahora es que, a partir del 1 de julio, no había que guardar cuarentena, pero es muy posible que esto cambie de aquí a la semana que viene. Si ordenan el aislamiento para quienes viajen desde Estados Unidos, los españoles que vayan para una semana o 15 días, no van a poder salir de las casas”.

“Los precios de los billetes han pasado de costar entre 400 y 500 euros a 2.500”

Ante la duda, son muchos los españoles que están intentando hacer cambios en las fechas de sus billetes de avión, pero les ha cogido tan desprevenidos, que no han tenido tiempo de reacción. Los precios de los billetes, por otro lado, han aumentado progresivamente: “Hay casos que sólo te permiten modificarlos con 15 días de antelación, con lo cual, no es viable, pero esperamos que las compañías respondan antes la situación, pero tampoco ellos tienen tiempo para hacer tantos ajustes. Los billetes desde Estados Unidos estaban al principio más económicos, entre 400 y 500 euros, pero los últimos que hemos emitido, rondan los 2.500 euros”.

Estamos en un sin vivir, tanto el sector como los pasajeros, todos esperando noticias para poder actuar. La semana que viene va a ser una locura porque hasta que no sepamos qué decide Europa y el Gobierno de España, sin un dictamen claro, las compañías aéreas no pueden dar un paso firme. Los próximos dos días son cruciales”, asegura la empresaria Ana Lizcano.

Un golpe añadido a las economías y sectores turísticos, azotados por la pandemia

Se estima que, más de 15 millones de estadounidenses viajan a Europa anualmente, por lo que cualquier retraso en la apertura de las fronteras supondría un golpe añadido a las economías y los sectores turísticos, devastados por el virus, tanto en Europa como en los Estados Unidos. Igualmente, se calcula que alrededor de 10 millones de europeos cruzan cada año el Atlántico para hacer negocios y para disfrutar de las vacaciones.

El presidente Donald Trump, también suspendió en marzo, mediante un decreto, la entrada de todas las personas de la zona de viaje libre de cheques de identificación de Europa.

El pasado miércoles, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo manifestó que la administración del presidente estadounidense estaba "trabajando con países de todo el mundo, incluidos los países de Europa y la propia UE, para establecer un plan de reanudación de los vuelos internacionales". Tras conocerse la primera lista de países admitidos por la Unión Europea en la reapertura de las fronteras exteriores, los titulares de los medios de comunicación estadounidenses consideran "descartada" o "poco probable” la posibilidad de que los viajeros de Estados Unidos puedan ingresar en la Unión Europea.

Se espera que los diplomáticos de la UE lleguen a un acuerdo oficial concluyente a última hora del lunes o temprano el martes.