Las llamas continúan devorando la costa mediterránea de Europa: Cerdeña, Atenas, Turquía, Macedonia y Albania siguen sufriendo el embate de las llamas. Más de 170 fuegos han teñido de rojo las costas turcas del Egeo y el Mediterráneo en una semana. En Grecia se han declarado un centenar de incendios en un solo día.
Los incendios han provocado la evacuación de unas 16.000 personas y al menos ocho muertos. Miles de hectáreas han sido destruidas por el fuego, en la isla de Eubea y en el Peloponeso. Las autoridades piden a los habitantes a limpiar el perímetro de sus casas de hierba y ramas de árboles, para que las altas temperaturas persistentes no provoquen nuevos incendios.
En Turquía, voluntarios y bomberos llevan luchando nueve días luchando sin descanso contra los incendios. Los vecinos observan desesperados cómo sus montañas arden sin remedio. La situación es crítica y el fuego avanza dejando un paisaje infernal.
La Unión Europea ha movilizado medios aéreos y terrestres para ayudar a las labores de extinción de los incendios forestales que están afectando a Italia, Grecia, Macedonia del Norte y Albania.
La Comisión Europea ha informado en un comunicado de que dos hidroaviones franceses han sido enviados a Italia para asistir este miércoles a sofocar las llamas que están arrasando la isla de Cerdeña. Además, en los incendios que afectan a Grecia, el vecino Chipre ya ha movilizado otros dos aviones, además de equipos de bomberos que ayudarán en las labores de extinción desde el terreno.
En el caso de los Balcanes, el fuego está golpeando Albania, país al que Países Bajos y República Chequia han enviado dos helicópteros para apoyar a los equipos de extinción, mientras que Eslovenia ha comprometido 45 bomberos para ayudar a los incendios en Macedonia del Norte.