Insólita historia que nos lllega desde la ciudad de Chihuahua, al noroeste de México. Un hombre, de 62 años, fue dado por muerto y su familia le organizó el entierro. Sin embargo, a las pocas horas de volver del funeral, el supuesto fallecido apareció en su vivienda.
Laurencio Armendáriz salió de su casa para llevar a cabo un trabajo de campo que le llevaría varios días. En ese tiempo, la Policía del municipio mexicano encontró el cadáver de un individuo que confundió, por su parecido, con el de Laurencio. Dieron entonces aviso a su familia que organizó el entierro.
En el velatorio, ya algunos familiares de Armendáriz se percataron de que se veía diferente, pero nadie pensó que no era su cuerpo. La sorpresa llegó cuando Laurencio se presentó en su casa esa misma noche después del entierro.
"Me sepultaron y mire, aquí ando caminando", confiesa Laurencio al 'El Diario de chihuahua' después de conocer lo ocurrido. "Me da coraje cómo las autoridades cometieron este error tan grave, pero en ocasiones me da risa porque la gente me mira asombrada ya que me dieron el último adiós en el panteón municipal”.
Ante la gran confusión, la Fiscalía Zona Sur explicó el jueves pasado, que la Policía Municipal no notificó al Ministerio Público sobre la muerte natural del hombre y el cuerpo jamás fue puesto a disposición del Servicio Médico Forense (Semefo). Por este movito, no se llegó nunca a realizar la identificación oficial y les dieron el cadáver a los parientes de Laurencio debido al parecido con el fallecido, según publica el periódico 'El Debate'.
La familia de Laurencio exige ahora que se invalide su acta de defunción. Por su parte, la Fiscalía del Distrito Zona Sur de México señaló que abriará una investigación para establecer cuál es la identidad de la persona fallecida.