Juan Guaidó, el autoproclamado presidente de Venezuela, comunicó este sábado a través de twitter que ha ordenado a su representante en Estados Unidos, Carlos Vecchio, ponerse en contacto con el comandante del Comando Sur de las Fuerzas Armadas estadounidenses, el almirante Craig Faller, para establecer relaciones de "cooperación".
"Hemos instruido al embajador Carlos Vecchio de inmediato a que se reúna con el Comando Sur para establecer relación directa en materia de cooperación. En todo momento he hablado de cooperación. La intervención ya existe, y es la penetración del ELN (Ejército de Liberación Nacional) de Colombia y los cubanos", ha afirmado Guaidó en referencia a la guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
"En paralelo hemos hablado con el Grupo de Lima y con el Grupo de Contacto. Recibimos una comunicación de la diplomacia de China donde dicen que se aproxima una solución a través del Grupo de Contacto", ha añadido el dirigente del partido Voluntad Popular.
En este sentido, Guaidó ha agradecido al Gobierno de Colombia por la solicitud y acuerdo que establece acciones directas contra el ELN ya que, según informa el diario 'El Universal', el 50 por ciento de esta guerrilla colombiana estaría operando en territorio venezolano.
"Hay información adicional del mismo Maduro, de que había facilitado recursos de inteligencia a miembros del ELN. Esto significa que el régimen de Maduro patrocina el terrorismo internacional", ha dicho Guaidó y ha recogido este mismo diario.
Asimismo ha anunciado que enviarán una carta al secretario general de la OEA (Organización de Estados Americanos), Luis Almagro para iniciar los procesos de reincorporación al TIAR. "Avanzamos en esa dirección, evaluando responsablemente la mejor opción, la que genere el cambio de forma más rápida para salir de esta crisis profunda que vivimos", ha añadido.
El Gobierno del entonces presidente Hugo Chávez ordenó en 2012 la retirada de Venezuela del SIDH y el TIAR, por considerar que eran instrumentos regionales al servicio de los intereses estadounidenses, aunque la decisión no se hizo efectiva hasta un año después, ya bajo la Presidencia de Nicolás Maduro.
El TIAR, bautizado como Tratado de Río, y del que Venezuela se retiró al mismo tiempo que Ecuador, Bolivia y Nicaragua, recoge una especie de cláusula de defensa colectiva que permitiría actuar a los demás países firmantes en caso de una agresión contra uno de ellos.