Los militares de Ucrania continúan hallando cadáveres en Bucha. Los trabajos de búsqueda avanzan en la fosa de la iglesia, de la que no paran de sacar muertos. Los equipos de rescate estiman que todavía quedan 70 cuerpos en bolsas, algunos de adolescentes y niños, tras haber sacado ya decenas. Rusia sigue negando las acusaciones estadounidenses de "genocidio".
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha acusado a su homólogo ruso, Vladímir Putin, de estar cometiendo un "genocidio" en Ucrania. Ha citado el término en una entrevista con el diario 'The Hill'. “Las evidencias están aumentando. Es diferente a la semana pasada. Están saliendo más evidencias de las horribles cosas que los rusos han hecho”, ha añadido.
El mandatario ha cambiado su tono en apenas unos días. La semana pasada, negó ante la prensa que lo sucedido en Bucha fuera un genocidio. "No, creo que es un crimen de guerra", dijo al ser preguntado. El balance se eleva a al menos 400 fallecidos civiles, según las autoridades ucranianas, muchos de ellos maniatados.
La respuesta del Kremlin a las palabras de Biden no ha tardado en llegar. El portavoz de Presidencia ruso, Dimitri Peskov, ha asegurado estar "categóricamente en desacuerdo" con ellas. De la misma manera, ha dicho que es "inaceptable intentar tal distorsión de la situación". Por último, ha criticado que Estados Unidos "ha cometido hechos bien conocidos en el curso de la historia moderna y reciente".
Mientras tanto, los ataques se recrudecen al este de Ucrania. Mariúpol está cerca de caer bajo el control ruso. La ciudad costera está prácticamente en ruinas a consecuencia de las bombas. El Ministerio de Defensa ruso ha aseverado que más de 1.000 soldados ucranianos se han rendido. Sin embargo, el ministerio ucraniano ha negado tales hechos.