Un grupo de 31 estudiantes de la Universidad Rovira i Virgili (URV) de Tarragona están confinados en un hotel de Malta por el positivo que ha dado un pasajero de su avión, a pesar de que 29 están vacunados, según han denunciado los propios afectados en las redes sociales. Los otros integrantes del grupo que no están vacunados presentaron una PCR negativa antes de embarcar, pero pese a estas circunstancias, el gobierno de Malta les ha obligado a guardar cuarentena.

Se trata de estudiantes de fisioterapia que han viajado a Malta para celebrar su graduación, en unas vacaciones previstas entre el pasado 25 de junio hasta el próximo 2 de julio, aunque están confinados desde ayer con la previsión de permanecer así 14 días. "Estamos muy cansados de la situación, nadie nos da una solución, queremos que alguien nos ayude de verdad”, explica con impotencia Natalia, una de las estudiantes que de momento no sabe cuando podrá volver a España en declaraciones a Nius.

“Tenía que venir el médico hace dos días y de momento no nos han dicho nada y no sabemos si tenemos que hacernos otra PCR”, explica Laia.

A través de sus redes sociales, bajo la etiqueta #AtrapadosenMalta, los jóvenes se quejan de falta de información y de un exceso de celo de las autoridades maltesas puesto que están vacunados y han cumplido con todas las medidas requeridas. Por su parte, la URV se ha puesto a disposición del grupo, ha lamentado la situación en la que se hallan y está ayudando a difundir el problema.

Por su parte, los afectados reclaman al Gobierno que les ayude a salir del país "para regresar a nuestras casas con nuestras familias -ha publicado en Twitter la recién graduada Sheila Maeztu-". Los estudiantes critican, además de la falta de información, que "el carnet de vacunación no tenga ningún valor". Por su parte, la Subdelegación del Gobierno en Tarragona ha informado de que se pone a disposición de los universitarios y que ya ha iniciado gestiones para facilitar su regreso.

Las estudiantes, Sheila Maeztu, estellesa de 24 años, y Oihane, de Caparroso, volaron a Malta el sábado 26 tras pagarse una PCR de su bolsillo (100 euros), puesto que es de exigencia para acceder al país. Además, en el vuelo todas portaron doble mascarilla (FFP2 y quirúrgica) y debido a su rama de estudio se encuentran además vacunadas, pero según les han comentado desde la Embajada española y las autoridades maltesas por el momento no es posible librarse de los 14 días de cuarentena. "Tendríamos que permanecer aquí, en un país que desconocemos y sin poder salir de las habitaciones hasta el 12 de julio. Esto es muy heavy", subraya Maeztu en declaraciones al diario Deia.