Al menos cinco personas han muerto la madrugada de este lunes a causa de la erupción del volcán de la Isla Blanca, también conocida como Whakaari, en el norte de Nueva Zelanda, según el último balance ofrecido por la Policía.
La erupción se ha producido sobre las 2.30 (hora local) en la isla, un estratovolcán activo de andesita que se encuentra a 48 kilómetros de la Isla Norte del país en la bahía de Plenty. Tal y como han explicado las autoridades, el cono ha expulsado humo y cenizas.
En rueda de prensa, el subcomisario de operaciones de la Policía, John Tims, ha informado que son ya cinco los fallecidos por la erupción, entre los que hay ciudadanos extranjeros, si bien no ha ofrecido nacionalidades.
El oficial ha precisado que la Policía desconoce si aún quedan personas con vida en la isla, de donde habían sido rescatadas previamente las cinco personas fallecidas así como otras 18 personas más, las cuales presentan heridas de diverso grado. Además, se cree que habría aún algunas personas en la isla, si bien se desconoce el número exacto, ha añadido.
Asimismo, Tims ha explicado que los servicios de emergencia no pueden llegar hasta la isla por motivos de seguridad. "La isla es inestable (...) el entorno físico no es seguro para que volvamos a ella", ha señalado, según informa el diario 'New Zealand Herald'. "Es importante que consideremos la salud y seguridad de los que regresarán a la isla", ha añadido el subcomisario.
Entretanto, la Fuerza de Defensa neozelandesa se ha sumado a la respuesta de emergencia. Uno de los aviones patrulla de la Fuerza Aérea ha sobrevolado la isla para vigilar la zona y dos helicópteros se han trasladado a Whakatane. Además, ya está en camino un buque de la Marina para ofrecer su apoyo.
La primera ministra del país, Jacinda Ardern, ha anunciado que se trasladará a la zona junto con el ministro de Protección Civil, Peeni Henare, y ha confirmado la presencia de turistas tanto en la isla como en sus alrededores, incluidos neozelandeses y extranjeros.
Ante la "preocupación y ansiedad" de quienes pudieran tener a familiares en el lugar, Andern ha asegurado que "la Policía está haciendo todo lo que puede". Ahora mismo, ha añadido en un comunicado, la prioridad es "garantizar que la Policía y la Agencia Nacional de Gestión de Emergencias tienen todos los recursos que necesitan".