Desde que mataron a los padres de Jayme Closs, James y Denise Closs, en octubre de 2018, no se tenía pista alguna de ella. Los investigadores estaban seguros de que estaba viva pero no habían dado con ninguna pista que le llevara a la chica de 13 años.
Las autoridades han confirmado que Jayme Closs ha sido localizada y llevada a un hospital y un hombre ha sido detenido, según ha informado CNN. De momento, el Departamento del Sheriff del condado de Douglas, en EEUU, no ha dado más detalles.
Lo único que se sabe de esta historia es que cuando mataron a balazos a los Closs, alguien llamó a Emergencias pero ni habló ni se identificó. El operador escucho gritos y avisó a la policía.
La llamada se había hecho desde el teléfono de la madre. Cuando los agentes llegaron a la vivienda de los Closs, al noroeste del Wisconsin, no había rastro de la menor. Los investigadores siempre pensaron que la chica estaba en la casa en el momento del tiroteo.