En el pueblo albanés de Qerret, cuatro turistas rusos han aparecido muertos dentro de la sauna de un complejo hotelero situado en la ciudad de Tirana. Los cadáveres de los cuatro turistas rusos han sido encontrados durante la noche del viernes 15 de octubre y pertenecen a los miembros de una familia.
Según han podido conocer varios medios locales, los cuerpos sin vida pertenecen a una pareja de 60 y 59 años, a su hija de 31 años y al marido de ésta de 37 años. Al parecer, los cuatro familiares habrían muerto dentro de la sauna tras haber pedido varias bebidas y varias piezas de fruta al servicio de habitaciones del centro hotelero.
Los cadáveres fueron encontrados por un trabajador del propio hotel que fue el encargado de llevar las consumiciones hasta la sauna donde se encontraba la familia.
Cuando el trabajador llegó hasta la zona en la que se encontraban los cuatro turistas rusos les avisó comunicándoles que ya tenían sus consumiciones en la puerta de la sauna. Al no recibir respuesta, el trabajador del hotel entró en la sana y se encontró los cuatro cadáveres dentro.
Nada más encontrarlos, los trabajadores de hotel llamaron a la Policía que, ahora, trabaja en la investigación. La primera hipótesis que sostienen los agentes de Policía es que la familia hubiese podido morir tras intoxicarse con los vapores de la sauna.
Sin embargo, no descartan ninguna otra hipótesis. Por eso, han comenzado a interrogar al personal del hotel y, también, les han realizado análisis toxicológicos a los cuerpos sin vida de la familia.