Después de pasa casi toda su vida pensando que habían sido asesinados por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, Morris Sana, de 87 años, y Simon Mairowitz, 85 años, dos primos judíos procedentes de Rumanía, se han vuelto a ver las caras 75 años después en un emotivo reencuentro en Tel Aviv.
Los dos lograron escapar del exterminio nazi con sus familias en 1940. Sus vidas tomaron rumbos diferentes, uno se instaló en Israel y el otro en el Reino Unido, pero durante todo este tiempo ambos creían que el otro que había muerto en algún un campo de concentración.
Al conocer su historia, sus hijos y nietos decidieron buscar el paradero de ambos a través de Internet y, sorprendentemente, descubrieron que los dos estaban vivos, organizando un reencuentro mágico, emotivo e irrepetible.