"Me quedé dormida pensando que era una descarada adolescente de 15 años y me desperté como una madre soltera de 32 años", cuenta Naomi en el diario The Sun.
"Lo último que recuerdo es que me quedé dormida en mi litera soñando con un niño de mi clase", explica, "cuando me desperté, este niño apareció y empezó a llamarme mamá". Fue entonces cuando empecé a gritar. Yo no sabía quién era, no pensaba que era mucho más joven que yo y ciertamente no recuerdaba haber dado a luz".
La joven, que vive en Manchester, había sufrido un episodio de amnesia y no recordaba nada de lo sucedido desde el año 1992. Naomi se despertó pensando que aún estaba en el instituto y su única preocupación era preparar los exámenes finales.
"Solo quería ver a mi mamá"
Naomi asegura que comenzó a llorar desconsoladamente al mirarse al espejo y comprobar que era una mujer madura, con arrugas, "me quedé petrificada, solo quería ver a mi mamá".
Los médicos diagnosticaron a Naomi, que ahora tiene 35 años, una amnesia global transitoria, una forma de pérdida de memoria aguda provocada por el estrés.
Con la ayuda de sus amigos, familiares, revistas y diarios, Naomi ha pasado los últimos tres años reconstruyendo su vida perdida y conociendo a Leo, su hijo de 11 años, de nuevo.