El país del mundo con mayoría de mujeres en el parlamento está en África. Ruanda tiene el récord de diputadas: 67%. Pero no se engañen. "Es todo un paripé, no es real", afirma contundente Nicole Ndongala, directora de la Asociación Karibu que ayuda a los africanos recién llegados a España. "¿Qué voz tienen esas mujeres? Ninguna, porque el gobierno no les deja", explica.
Nicole sabe bien de lo que habla. Esta congoleña llegó a nuestro país hace más de veinte años, huyendo de la guerra en el suyo. Desde entonces el papel de la mujer en el continente africano ha avanzado, sobre todo, en países como Kenia o Etiopía, donde desde octubre de 2018 gobierna Sahlework Zewde, la única presdienta en todo el continente. Pero en otros países no tiene ningún protagonismo. Algo que se palpa este 8M, Día Internacional de la Mujer.
El 8 de marzo en África es un día de fiesta en el que los hombres hacen regalos a las mujeres. Telas, por ejemplo, para que se hagan trajes. "Es una manera de callarlas", explica Nicole. "Siempre nos han metido en la cabeza que el 8M es un día festivo, no un día en que la mujer tiene que reclamar sus derechos. Ahora las mujeres empoderadas saben que es un día reivindicativo".
Pero hay miedo, sobre todo en las zonas rurales. Cerca del 50% de las mujeres de África no saben leer ni escribir, según datos de la ONG Misiones Salesianas, y son las encargadas de mantener a su familia, las que van en busca del agua, las que cosechan, preparan la comida, cuidan de los menores y los ancianos. Por eso sus reivindicaciones distan mucho de las que reclaman las mujeres europeas.
"El feminismo en África siempre ha existido pero con otro nombre", afirma la directora de la Asociación Karibu. Cree que en Europa tenemos una imagen de su continente que no es real. Aclara que no necesitan lecciones de occidente porque ellas han conseguido objetivos que la mujer europea no. "La mujer como mediadora de conflictos. Ha ocurrido en Congo y también en Mali".
Saran Keïta Diakité, presidenta de la oficina en Mali de la ONG Red de Mujeres por la Paz, fue mediadora durante las conversaciones de Paz en 2012. "Las mujeres son la clave para la paz. Las mujeres entienden el valor de la vida. Aman la vida. Dan la vida. Salvan vidas", sentenció.
Más de 200 millones de mujeres han sufrido mutilación genital en 30 países de todo el mundo; 27 de ellos, en el continente africano, según datos de UNICEF. Un total de seis países, en los que viven 16 millones de niñas (Chad, Liberia, Malí, Sierra Leona, Somalia y Sudán) la ablación sigue siendo legal.
La Organización Mundial de la Salud, en su empeño por concienciar de la necesidad de erradicar esta práctica brutal, ha cuantificado el coste de los efectos secundarios que causa la mutilación genital: 1.300 millones de euros al año.
"Ojalá algún día se erradique la ablación", afirma Nicole Ndongala. "Para muchas mujeres que las practican es un medio de vida, su trabajo. Hay que fomentar un plan B para ellas. Algo que ningún político se ha planteado hasta ahora".