Juan Malvasio, el fiscal de Paraná, ha explicado que tras la muerte de Nahiara "el padre fue detenido y se le imputó homicidio agravado por el vínculo, se abstuvo de prestar declaración y se pidió la prisión preventiva en la Unidad Penal 1 por 60 días". Yanina Lescano, la madrastra, fue arrestada días después, acusada por ser cómplice de los maltratos, tal y como recoge 'Clarín'.
"No está la autopsia completa, pero en el informe preliminar se pudo corroborar que tenía quemaduras de cigarrillos, golpes y una desnutrición generalizada que le provocó una falla multiorgánica y la muerte", ha detallado Malvasio.
El fiscal ha destacado que "es un hecho macabro" y que "las imágenes fotográficas del informe de la autopsia demuestran con claridad meridiana la tortura que tuvo que padecer por parte del padre".
Por su parte, el director del hospital San Roque, Marcelo Itharte, ha subrayado que cuando la niña llegó al hospital "estaba con dificultad respiratoria, tenía excoriaciones, úlceras, le faltaba el puente de la nariz, tenía hematomas, todos en distintos grados de evolución, y también tenía lesiones en el oído"."Algunas lesiones eran más recientes y otras más antiguas. Tengo casi 20 años en terapia y nunca vi un caso así; el tipo de lesiones son horrorosas", ha asegurado.
El fiscal ha explicado que Nahiara empezó a sufrir malos tratos en agosto de 2018, cuando se trasladó a vivir con su padre, con Lescano y con tres hijos de la mujer. "Hasta julio, cuando estaba con los abuelos paternos, su estado de salud era normal, tenia un buen peso, todas la vacunas al día", ha añadido el funcionario judicial.
El padre declaró el viernes por primera vez y acusó a Lescano, que el mismo día de la muerte de Nahiara tuvo un bebé, producto de su relación con Cristo. Explicó que era víctima de amenazas, que había cuestiones que desconocía y culpó a su pareja como la autora de este hecho.
Asimismo, el hombre en su declaración sostuvo que no maltrató a su hija: "Yo siempre la cuidaba. Era ella la que andaba en brujerías y me tenía amenazado con un arma. Me golpeó. Averigüen quién es la familia de ella".
Por su parte, la versión de la mujer, de Lescano, fue totalmente distinta y aseguró que él sí que la maltrataba: "Yo le alcanzaba un balde de agua para desatarla cuando él la ataba. Seguramente podría haber hecho algo más, pero realmente no podía. No puedo creer lo que dice Cristo. Él cuenta como si nada lo que nos hacía a nosotros".
Asimismo, Lescano aseguró no creer "que él pueda mentir así" y denunció ser víctima de violencia de género.