Tiene sólo 24 años, se quedó huérfana siendo apenas una niña y desde entonces cuida de su hermano enfermo. Trabaja de sol a sol, pero casi no le llega para comer y por eso pesa solo 20 kilos. Desnutrida, ahora está hospitalizada. Su historia de sacrificio está provocando una gran ola de solidaridad en su país, en China.
Aunque no lo parezca Wu Huayan tiene 24 años, mide 1,35 metros y supera, por muy poco, los 20 kilos de peso. Una desnutrición aguda detrás de la que hay una historia de dolor y mucho sacrificio.
La joven vive en Guizhou, una zona rural, de las más pobres de China. Perdió a sus padres siendo solo una niña y quedó bajo la tutela de su hermano pero este desarrolló una complicada enfermedad mental que requiere de un caro tratamiento. Desde entonces, hace ya cinco años, Huayan compagina sus estudios con dos trabajados distintos para poder pagar los medicamentos de su hermano.
Ella sobrevivía con lo mínimo: su presupuesto era de 2 yuanes al día, unos 26 céntimos de euro y le daba solo para una pequeñísima porción de arroz.
Las imágenes de la extrema delgadez de Huayan han conmocionado al país, que se ha volcado con la joven recaudando para ella y su hermano más de 60.000 euros en solo unos días.