La apelación judicial del serbio Novak Djokovic se llevará a cabo este lunes, después de que los abogados del Departamento del Interior de Australia perdieran un intento de retrasar el día de la vista de apelación.
Los abogados de Asuntos Internos pidieron al Tribunal de Circuito Federal pasar el caso del lunes al miércoles, pero el juez Anthony Kelly desestimó la solicitud. Retrasar la apelación hasta el miércoles habría supuesto superar la fecha límite establecida por la Federación de Tenis de Australia (Tennis Australia) para su inclusión en el próximo Abierto de Australia, que comenzará el 17 de enero.
El equipo legal del número uno del mundo está luchando para que sea liberado para poder prepararse y participar en el 'Grand Slam' oceánico en Melbourne.
Los funcionarios de la Fuerza Fronteriza de Australia cancelaron su solicitud de visado el jueves, declarando que Djokovic "no proporcionó las pruebas adecuadas para cumplir con los requisitos de entrada a Australia". Los organizadores del Abierto de Australia habían concedido a Djokovic, que no está vacunado contra el coronavirus, una exención médica, pero su destino ahora está en juego.
Los abogados del tenista serbio Novak Djokovic, retenido en un hotel a su llegada a Melbourne (Australia), aseguran que el jugador recibió una exención médica para jugar el Abierto de Australia después de contraer la COVID-19 el pasado mes de diciembre.
En documentos judiciales publicados este sábado en los medios, se afirma que el tenista balcánico registró una prueba positiva por COVID-19 el 16 de diciembre y que "no ha tenido fiebre ni síntomas respiratorios de COVID-19 en las últimas 72 horas".
Djokovic ha estado detenido en un centro de inmigración en Melbourne desde el jueves por la mañana después de que se cancelara su visado tras revisarse la exención médica que había presentado para viajar a Australia para participar en el primer 'Grand Slam' de la temporada.