El puente se derrumbó en la aldea de Bezhta, en la república rusa de Daguestán, en el suroeste de Rusia. Varios curiosos se acercaron al lugar de los hechos para conocer lo sucedido. Con el hundimiento del puente, cayeron tres coches al agua, pero un cuarto vehículo fue arrastrado por algunos testigos para que no tuviera el mismo destino, y así evitar un mal mayor.
El Ministerio del Interior ruso expresó en un comunicado que el puente podría haber sido demasiado frágil para soportar el peso de cuatro vehículos. Asimismo, informo que ninguna persona resultó herida tras el incidente, ya que los propietarios de los automóviles se encontraban en la mezquita de la localidad en el momento del derrumbe.