Según informa el diario Daily Mail, tres años después de la brutal agresión, Bélgica juzga al hombre que roción con ácido sulfúrico el rostro de su mujer porque quería dejarle. Patricia Lefranc quiere que su ex pareja sea juzgada por intento de asesinato.
La mujer, de 48 años de edad, ha sido sometida a 86 intervenciones quirúrgicas y está decidida a que su marido pague por lo que hizo, "espero convencer al tribunal de que, efectivamente, me quería asesinar".
"Dejo que la corte decida la seriedad con la que debe ser castigado, pero no voy perder de vista el hecho de que se me condenó al dolor, tanto físico como psicológico, para toda la vida", afirma Patricia en su desgarradoras declaraciones, "Remes ha arruinado mi vida como mujer, me ha convertido en un monstruo".
Según algunos medios de comunicación, Richard Remes ha justificado su acción asegurando que se trata de "una broma que terminó mal". El agresor asegura que solo quería darle un susto a Patricia, "quería marcarla, pero nunca imaginé que sería tan rápido".