Varios miles de personas han salido a las calles de Melbourne, en Australia, para protestar contra las vacunas y la exigencia del pasaporte verde para acceder a establecimientos públicos y otras industrias, además de para trabajar en centros de sanitarios.
A las protestas semanales de los antivacunas ahora se han unido ciudadanos de toda condición. Mientras, otro grupo más pequeño mostraba también en las calles su apoyo a las vacunas y su rechazo a los movimientos de extrema derecha.
El 88 por ciento de los australianos mayores de 16 años ya han recibido la pauta completa del suero. Como en otras partes del mundo, la mayoría de los hospitalizados con covid son personas que no han sido vacunadas.
En el estado de Victoria, el 90 por ciento de las 44 personas que se encuentran en la UCI o no se habían inmunizado o no habían recibido las dos dosis.