La capitana del barco de la ONG alemana Sea Watch, Carola Rackete, ha quedado en libertad este martes 2 de julio. La activista alemana fue detenida la madrugada del pasado sábado después de atracar sin autorización en Lampedusa para llevar a 40 inmigrantes rescatados el 12 de junio en el Mediterráneo.
La jueza de Agrigento, Alessandra Vella, ha rechazado el delito de “resistencia y violencia a una nave de guerra”, del que la había acusado por saltarse el alto de la Policía y golpear a una nave militar. La magistrada sostiene que la capitana "actuó para cumplir el deber de llevar a los migrantes a lugar seguro", según ha recogido el diario italiano La Repubblica.
El pasado lunes, Rackete había compadecido ante la magistrada. Entonces, aseguró que no había querido golpear a la patrullera. "Pensé que no se movería. No quería golpearlos", afirmó. La Fiscalía la acusaba de los delitos de negativa a obedecer a un buque de guerra, resistencia a la autoridad, violencia contra buques de guerra o navegación en zona prohibida. Por ello, solicitaba la validación de la detención.
La detención de Carola Rackete ha generado una gran controversia. El ministro de Interior italiano, Matteo Salvini, ha lamentado a través de su cuenta de Twitter que "para la Justicia italiana ignorar las leyes y embestir una patrulla de la Guardia di Finanza no son motivos suficientes para ir a la cárcel".
Asimismo, Salvini ha resaltado que la decisión del juez "no es un problema" y ha subrayado que "la comandante criminal" será enviada de vuelta a Alemania "debido a que es peligrosa para la seguridad nacional".