Un jubilado halló una enorme pepita de oro de más de dos kilos valorada en unos 110.000 dólares asutralianos (80.248 dólares o 68.114 euros) en una remota zona del suroeste de Australia, informaron este viernes medios locales.
El hombre, que no quiso ser identificado, dijo que había rastreado con un detector de metales durante años el mismo lugar situado en la región de Goldfields, en el estado de Australia Occidental, y que tuvo el golpe de suerte tras mejorar su tecnología.
El buscador precisó que la pieza, que pesa unos 3,23 kilos, contenía unas 68 onzas de oro, que equivalen a 2,11 kilogramos de este metal precioso, informa Europa Press.
"Estaba (enterrada) a mucha profundidad, a unos 800 milímetros en tierra de arcilla y tardé más de dos horas de excavación cuidadosa para sacarla", dijo el descubridor según la agencia local AAP.
Según el testimonio de una fuente cercana al hombre, que dice conocerlo desde hace tiempo, el protagonista de esta historia es un auténtico "especialista en buscar pepitas".
"Creo que esto demuestra que todavía hay mucho oro por ahí, incluso en áreas que podrías pensar que han sido limpiadas", ha declarado a Guardian News.
La pepita de oro ya ha recibido un nombre por parte de su perseguidor y está relacionado con su peculiar forma: 'Pata de pato'.
A principios de mes, la empresa canadiense RNC Minerals anunció que halló 9.250 onzas de oro de más de 15,9 millones de dólares australianos (11,59 millones de dólares o 9,84 millones de euros) en el yacimiento aurífero de Beta Hunt, en el área de Goldfields.
El hallazgo de la minera incluye dos rocas de 95 y 63 kilos de peso, que tenían entre las dos más de 4.000 onzas del metal dorado.