El derrumbe de una cantera, cerca de la antigua Línea Gótica, sepultó a dos perros de caza en la localidad de Castiglione de Pepoli, cerca de Bolonia (Italia). Los canes, que se habían colado en el interior por una grieta, quedaron atrapados bajo los escombros.
Tras el incidente, el dueño avisó a los bomberos, quienes invirtieron más de 30 horas en el rescate de los canes. Eso sí, después de movilizar a la policía militar por miedo a que en el subsuelo pudiese detonarse algún artefacto explosivo datado de la Segunda Guerra Mundial según medios locales.
Finalmente, los canes, que sobrevivieron a la aventura, pudieron reencontrarse con su dueño.