El balance de muertos a causa de los bombardeos ejecutados este martes en las provincias sirias de Alepo e Idlib, achacados a aviones rusos, ha ascendido a 22, tal y como ha informado el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El organismo con sede en Londres e informantes en el país árabe, ha resaltado que trece de las víctimas mortales son niños y ha agregado que el balance podría aumentar en las próximas horas debido a que los ataques han dejado más de 40 heridos, algunos en estado grave.
Así, ha detallado que ocho personas han muerto en un ataque aéreo en la ciudad de Kafar Taal, situada en la provincia de Alepo. Las víctimas son un hombre, su esposa y sus seis hijos. En esta misma ciudad ha muerto otro hombre en otro ataque.
El Observatorio ha agregado que otros dos niños han fallecido en ataques en otros puntos de esta misma provincia, mientras que dos adultos han muerto en bombardeos en Al Bará, en el sur de la provincia de Idlib (noroeste).
Por otra parte, al menos siete desplazados internos, entre ellos tres niños, han muerto en otro ataque aéreo contra la localidad de Kafrernan, ubicada también en Alepo. Por último, otros dos niños han muerto en otros bombardeos en Alepo.
Durante la jornada del lunes murieron siete civiles y más de 30 resultaron heridos en bombardeos achacados a Rusia en Alepo. Los ejércitos de Siria y Rusia han llevado a cabo decenas de bombardeos en los últimos días contra zonas controladas por los rebeldes en las provincias de Alepo, Homs e Idlib, esta última la única que sigue controlada por fuerzas rebeldes.
Los bombardeos aéreos se reanudaron el miércoles y el jueves de la semana pasada, a pesar del alto el fuego acordado en la zona días antes.
De hecho, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, afirmó el viernes que lo que pasa en Idlib "es la clara muestra de que el régimen no cumple con los pasos relativos al alto el fuego", según el diario turco 'Hurriyet'.
El propio Erdogan aseguró el 14 de enero que Turquía está decidida a frenar los intentos por parte del Gobierno de Bashar al Assad de violar el alto el fuego. "Estamos decididos a frenar los intentos del régimen de violar el alto el fuego, nosotros mismos si es necesario", afirmó, para recalcar a renglón seguido que "no es ninguna broma".
La provincia de Idlib y zonas de las de Alepo y Hama se encuentran en manos de varios grupos armados, el más importante de los cuales es el grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS). El Gobierno de Siria ha defendido que la ofensiva es parte de su lucha contra el terrorismo en el país.