El Banco Mundial estima que la crisis por el coronavirus será peor que la Gran Recesión
La crisis se cebará con los más pobres y vulnerables, vaticina el Banco Mundial
Desplegará 160.000 millones de dólares para países pobres de Asia, África y América Latina
El presidente del Banco Mundial, David Malpass, ha vaticinado que la pandemia de coronavirus provocará "una recesión mundial mucho más profunda" que la crisis financiera de 2008 y que podría aniquilar el progreso reciente logrado por los países pobres. "Nuestras estimaciones sugieren una recesión mundial mucho más profunda que la Gran Recesión, dada la disminución de la producción, la inversión, el empleo y el comercio", advirtió el jefe de la institución.
Durante la más reciente reunión semestral del Banco y el FMI, que en esta ocasión se celebró de forma virtual por el COVID-19, Malpass aseveró que el planeta se encuentra ante "una crisis sin precedentes, con devastadores efectos sanitarios, económicos y sociales en todo el mundo".
Malpass sostuvo además que, si bien los efectos trágicos de esta pandemia "se están sintiendo en todo el mundo", la crisis probablemente afectará más a los países y a las personas más pobres y vulnerables. Por ello, el organismo tiene intención de desplegar 160.000 millones de dólares en fondos, durante los próximos 15 meses, hacia los países pobres de Asia, África y América Latina.
El objetivo es fortalecer su respuesta a la crisis de salud y su recuperación económica. Sin embargo, matizó que "está claro que no será suficiente". "Si no nos movemos rápidamente para fortalecer los sistemas y la resiliencia, los avances en desarrollo de los últimos años se pueden perder fácilmente", aseguró.
FMI Y OIT también coinciden en las peores previsiones
La economista jefa del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, expresaba hace unos días que "es muy probable que la economía global experimente su peor recesión desde la Gran Depresión de los años 30 sobrepasando la vista durante la crisis financiera global de hace una década. Se prevé que la Gran Reclusión, como se podría llamar, disminuirá el crecimiento global de forma dramática". A ello hay que sumar la incertidumbre sobre su duración o intensidad.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) estimaba en su informe 'El COVID-19 y el mundo del trabajo Estimaciones actualizadas y análisis' que estamos ante la peor crisis mundial desde la Segunda Guerra Mundial. La OIT estima que 1.250 millones de trabajadores, esto es, el 38 por ciento de la población activa mundial, están empleados en sectores que hoy afrontan una grave caída de la producción y un alto riesgo de desplazamiento de la fuerza de trabajo.
ONU advierte sobre la solvencia de los países pobres
Naciones Unidas también alerta de que la crisis de liquidez a la que se enfrentan los países por la pandemia del coronavirus puede llegar a convertirse en un problema de solvencia en los países pobres. "No está claro si los países en desarrollo volverán al mismo nivel de exportaciones y condiciones comerciales que antes de la pandemia, ni cuándo lo harán", precisa el documento, que agrega que "es posible que los países se encuentren en una trayectoria de menor crecimiento económico en el futuro, lo que afectará el acceso a los mercados financieros durante los próximos años, sin que sea culpa suya".
Según las estimaciones iniciales, África podría estar entrando en su primera recesión en 25 años, mientras que América Latina y el Caribe se enfrentan a la peor recesión de su historia. Así, pese a que, en el mejor de los casos, las economías de los países desarrollados podrían empezar a recuperarse a finales de este año, este no es el panorama que se vislumbra para los países en desarrollo.