Un buscador de oro desenterró una pepita del metal precioso de 1,4 kilogramos de peso cerca de la ciudad australiana de Kalgoorlie, según informó 'The West Australian'.
Se estima que el hallazgo, vendido en una tienda de esa localidad, está valorado en unos 69.000 dólares (unos 42.700 euros), detalla el medio.
Aunque no quiso revelar el nombre del vendedor, Matt Cook, dueño de la tienda, precisó que el hombre encontró la pepita cuando sondeaba los llanos de la zona con un detector de metales. Asimismo, explicó que ese tipo de hallazgos tienen lugar unas pocas veces al año, puntualizando que estos suelen ser realizados por especialistas que disponen de aparatos mucho más pesados que un simple detector.
"Es bueno ver a gente encontrando pepitas como esta", dijo Cook, añadiendo que "son más difíciles de encontrar, pero siguen estando ahí fuera".
El dueño de la tienda afirma que no puede recordar un año en el que hubiera tantos buscadores como este 2019. "Los precios del oro están altos en este momento, es como una fiebre del oro", comentó.