Los tres niños juegan a las puertas de su casa cuando de repente aparecen dos perros que los asustan. Los pequeños salen corriendo y los animales empiezan a perseguir a uno de ellos.
Intenta escapar escondiéndose en un portal pero justo cuando va a entrar, tropieza con un escalón cae y no puede evitar el ataque. Los perros comienzan a morderle y lo arrastran por las escaleras.
El niño logra zafarse e intenta huir de nuevo. Corre pero los perros le alcanzan otra vez. El pequeño no tiene suficiente fuerza para enfrentarse a los animales y el ataque parece interminable.
Por fin aparecen dos mujeres. Una de ellas es la dueña del pastor alemán que intenta agarrar al perro por la cola. La otra mujer es todo un ejemplo de valentía. No duda en abalanzarse sobre el niño y protegerlo con su cuerpo.
Aún así el pequeño ha sido trasladado al hospital con heridas graves en la cabeza, los brazos y las piernas.