Kasimer Wojno, sacerdote polaco de la parroquia de Nossa Senhora de Saúde (Brasilia, Brasil) de 71 años, fue asesinado durante un robo el pasado 21 de septiembre. Tras oficiar una misa, fue atado de piernas, brazos y cuello. Después le estrangularon y redujeron a Gonzanga de Costa, el casero de la parroquia, y finalmente robaron el templo, llevándose símbolos de culto religioso.
Según afirma el WP, el sacerdote "fue, entre otros, el notario de la corte episcopal". Fue ordenado el 27 de mayo de 1973, realizó misiones en la República Democrática del Congo, Haití, la República Dominicana y ahora se encontraba en Brasilia.