Joanna Dennehy apuñaló a su casero Kevin Lee, de 48 años y a sus compañeros de piso Lukasz Slaboszewski, de 31, y John Chapman, de 56 años, a los pocos días.
El cuerpo de Lee, casado y con hijos, fue encontrado en una cuneta de una carretera. Fue apuñalado. Cuatro días más tarde, un agricultor encontró los cadáveres de los otros dos hombres en un remoto dique a cinco kilómetros de distancia. La autopsia reveló que Slaboszewski había sido apuñalado en el corazón.
Durante todo el juicio, Dennehy se había declarado inocente de los cargos de asesinato y de impedir un entierro para los cuerpos.
"Me declara culpable y eso es todo.” Estas fueron las palabras de la acusada en el turno de última palabra. La sala quedó aturdida con sus palabras y su abogado, Nigel Lickley, dijo que “eso no es lo que habíamos anticipado ", según recoge el diario the Telegraph.
Dennehy también se declaró culpable de los intentos de asesinato de otros dos hombres, Robin Bereza y John Rogers y se opuso a revisar sus palabras como querían sus abogados: "Yo no voy a volver aquí otra vez sólo para decir las mismas cosas”.
Según los testimonios recogidos durante el juicio, puede que una disputa sobre el alquiler de la casa desencadenara los hechos. Según los testigos, Lee le había pedido a Dennehy y sus compañeros de piso que debían abandonar la vivienda.