Una pareja atacada por un león durante un safari de lujo en Tanzania (África Oriental) ha demandado a la compañía británica que le organizó las vacaciones. Afirman que el proveedor de vacaciones Africa Travel Resource (ATR) no cumplió con su deber de velar por la seguridad de los clientes durante el horrible incidente, pero la empresa ha negado toda responsabilidad.
Patrick Fourgeaud, de 64 años, y su esposa Brigitte, de 63, pasaban unas lujosas vacaciones en el Parque Nacional de Ruaha (Tanzania) en agosto de 2015. Un día, al despertarse, había en su tienda de campaña un león que olisqueaba la espalda de la mujer. Enseguida después el salvaje animal se abalanzó sobre el hombre y le arrancó parte del brazo izquierdo.
Fourgeaud ha tenido que someterse a 10 operaciones para reconstruir su brazo, y previsiblemente tendrá más cirugías en el futuro. La pareja todavía confronta problemas de salud mental, y Brigitte, en particular, sufre un trastorno de estrés postraumático y depresión. "Nunca olvidaré el momento en que me desperté y vi al león allí. Pensé que ambos íbamos a morir", afirmó la mujer.
La pareja, que pasó tres noches en otro campamento antes del incidente, afirma que no había barreras físicas entre el campamento y los animales salvajes del parque por parte de ATR. También alegan que no había vigilancia en el lugar y que su guía no tomó precauciones.
Leane Shanks, del bufete de abogados de Irwin Mitchell, que representa a los Fourgeaud, subrayó también en el diario Metro, que los operadores turísticos y las empresas de vacaciones "tienen el deber de velar por la seguridad de los clientes", cosa que en este caso, sostuvo, "no sucedió".