El dirigente opositor ruso Alexei Navalni fue envenenado en su país con un agente nervioso del grupo Novichok, según las "pruebas inequívocas" que ha encontrado el laboratorio especial de las Fuerzas Armadas alemanas tras analizar unas muestras.
"Se han encontrado pruebas inequívocas del suministro de un agente nervioso del grupo Novichok", ha asegurado en un comunicado el portavoz del Ejecutivo alemán, Steffen Seibert, tras los análisis realizados por el laboratorio especial de las Fuerzas Armadas alemanas a instancias del hospital Charité, donde permanece ingresado.
El agente químico Novichok es del mismo tipo que el que fue empleado contra el ex espía ruso Sergei Skripal y su hija en Reino Unido en marzo de 2018. Navalni se sintió mal el pasado 20 de agosto mientras volaba de regreso a Moscú desde Siberia, obligando a realizar un aterrizaje de emergencia al avión en que viajaba en la ciudad de Omsk, donde quedó ingresado en coma en la UCI con respiración asistida.
Tras ello, su portavoz, Kira Yarmish, sostuvo que este había sido envenenado con alguna sustancia que se introdujo en el te que tomó por la mañana en el aeropuerto. Sin embargo, los médicos llegaron a la conclusión de que lo que sufrió Navalni fue un "trastorno metabólico" provocado por una fuerte caída del nivel de azúcar en la sangre. Finalmente, el opositor fue evacuado en un avión medicalizado fletado por la ONG Cinema for Peace el 22 de agosto a Berlín.
Los médicos alemanes que le atendieron aseguraron que los exámenes médicos indican y confirman que el político fue envenenado. Navalny ha sido uno de los principales opositores con la gestión del Kremlin, durante más de una década, exponiendo que Rusia vive una gran corrupción de alto nivel y movilizando multitudes de jóvenes manifestantes. Ha sido detenido en repetidas ocasiones por organizar reuniones públicas y manifestaciones y ha sido demandado por sus investigaciones sobre corrupción. Además, se le prohibió postularse en las elecciones presidenciales de 2018.