El Gobierno de la región rusa de Belgorod, en la frontera con Ucrania, ha ordenado a miles de habitantes de un distrito desplazarse hacia lugares "más seguros" por "actividad enemiga" en la zona fronteriza, unos movimientos que coincidirían con la ofensiva en la vecina Kursk.
"Es una mañana alarmante", ha advertido el gobernador de Belgorod, Viacheslav Gladkov, en un mensaje en el que ha planteado el traslado de habitantes del distrito de Krasnoyaruzhski. "Estoy seguro de que nuestros efectivos harán todo lo posible para contrarrestar la amenaza", ha declarado, según la agencia TASS.
Otro responsable local, Andrei Miskov, ha indicado que tras estos primeros avisos ya han abandonado la zona unos 11.000 de los 11.500 habitantes del distrito.
Quienes no lo han hecho, ha explicado, "permanecen en sus puestos de trabajo", lo que permitirá entre otras cuestiones el funcionamiento de la administración pública.
El gobernador ha informado en su cuenta de la red social Telegram de cortes de electricidad en al menos 13 localidades de la región, todas ellas del distrito de Graivoronski. El Ministerio de Defensa ruso también ha confirmado el derribo de cinco drones en Belgorod durante la noche del domingo al lunes.
Otros 18 drones han sido derribados en la región de Kursk, situada igualmente en la frontera. El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, confirmó este fin de semana por primera vez la presencia de tropas ucranianas en esta provincia tras varios días de intensa ofensiva.
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