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La tierra vuelve a temblar en Japón, donde las autoridades del país han informado de un nuevo terremoto de magnitud 6 que ha sacudido este martes a la costa oeste nipona; la misma zona que fue asolada por el seísmo que la pasada semana, en el día de Año Nuevo, dejaba un balance oficial de 202 muertos y 102 desaparecidos, además de miles de heridos.
En el caso de este nuevo terremoto, por el momento no se han reportado daños significativos y no se ha activado la alerta de tsunami, aunque la población permanece atemorizada ante que se produzcan nuevas réplicas.
El temblor ha sido detectado en un punto próximo al del seísmo del pasado día 1, a aproximadamente las 17:59 hora local, con epicentro a una profundidad de 10 kilómetros frente a la costa de la prefectura de Niigata, según ha informado la Agencia Meteorológica de Japón (JMA).
Precisamente, este organismo instaba recientemente, una semana después del primer gran temblor, a no bajar la guardia, considerando que podían producirse réplicas potentes, tal como ha ocurrido hoy a unas decenas de kilómetros de la localidad de Sado, según ha precisado el citado instituto.
Justamente hoy las autoridades japonesas elevaban a 202 ese balance oficial de víctimas mortales por el terremoto de magnitud 7,6 en la escala de Richter que el día de Año Nuevo provocó fuertes temblores en la zona oeste del país.
Además de dejar 102 desaparecidos, unas 28.000 personas continúan aún en centros para evacuados en la prefectura de Ishikawa, la más afectada por los temblores, mientras que al menos 3.300, principalmente en la localidad de Wajima y en áreas adyacentes, permanecen aisladas por los daños en las infraestructuras, a los que se ha sumado en los últimos días una intensa nevada.
Ante este escenario, el Gobierno de Fumio Kishida ha aprobado este martes destinar 4.740 millones de yenes (unos 30 millones de euros) de los fondos de reserva para ayudar a los damnificados por el seísmo y prevé revisar también el borrador presupuestario del próximo ejercicio fiscal, que comienza en abril, para sufragar gastos de reconstrucción.
La vuelta a las clases se ha aplazado en las áreas más afectadas, donde se siguen efectuando labores de rastreo. El ministro de Defensa, Minoru Kihara, ha indicado que unos 6.300 efectivos participan en estos trabajos de búsqueda y rescate, según la agencia de noticias Kiodo.
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