Mata a su madre para que no se entere de que le han echado de la universidad: le propinó un sartenazo y 30 puñaladas
Una joven ha sido declarada culpable de matar a su madre en Estados Unidos para que no se enterase de que la habían expulsado de la universidad
La detenida le propinó un sartenazo y más de 30 puñaladas en el cuello que acabaron con su vida
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Sydney Powell es una joven de solo 23 años que ha sido declarada culpable de haber matado a su madre en la localidad estadounidense de Summit, en Ohio. El juicio por el asesinato de Brenda Powell, la madre de la joven, se ha celebrado en diferentes jornadas y, tras deliberar, el tribunal ha decidido declarar culpable a su hija de su asesinato, agresión criminal y, también, de la manipulación de las pruebas de dicho crimen.
Completamente desolada, la joven se rompía el pasado miércoles mientras escuchaba la sentencia que había emitido el tribunal encargado de su caso. El asesinato de su madre ocurrió en marzo de 2020. Sin embargo, ha sido ahora cuando el juicio se ha celebrado y han declarado a la joven culpable del crimen.
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El asesinato a su madre
Según han informado los medios locales estadounidenses, todo comenzó el 3 de marzo de 2020 cuando Brenda Powell escuchó una llamada de su hija en la que hablaba con su universidad. Al parecer, el centro educativo estaba comunicando a la estudiante que habían decidido echarla y eliminar su matrícula.
Fue entonces cuando Sydney Powell y su madre empezaron a discutir acaloradamente. En un momento de la disputa, la hija, que entonces tenía 19 años, le propinó un golpe seco a su madre con una sartén. Completamente inconsciente, Brenda Powell cayó al suelo y su hija le propinó más de 30 puñaladas en el cuello.
A la espera de otro juicio para ver dónde cumple su pena
Mientras, el teléfono móvil seguía en llamada y, tras escuchar la brutal pelea, la Universidad decidió llamar a la Policía y comunicarles la situación. El cuerpo de Brenda Powell fue trasladado hasta un centro hospitalario de la zona. Sin embargo, en el centro médico tan solo pudieron certificar su muerte.
Durante estos tres años, Sydney Powell ha permanecido en libertad bajo fianza debido a que en su declaración alegó trastornos psicológicos graves al padecer esquizofrenia. Ahora y tras emitirse la sentencia del asesinato de su madre, la joven ha sido detenida.
No obstante, el próximo 28 de septiembre se celebrará otro juicio en el que se decidirá si Sydney Powell cumplirá su pena en una cárcel o en un centro psiquiátrico.