Oficialmente sigue sin constar que haya víctimas entre los españoles que residen en Marruecos o entre los que están de vacaciones en este país tras el terremoto que sacudió al país la noche del viernes y que ha causado la muerte de más de 2000 personas y cuantiosos daños materiales. Con el susto aun en el cuerpo, los turistas españoles que aún no han aterrizado en nuestro país tratan de salir a toda costa y regresar cuanto antes a casa.

“Muchos los españoles que están intentando todavía volver a España. Desde el terremoto, ha sido casi imposible encontrar un vuelo y los que lo conseguían han pagado precios desorbitados”, ha señalado Serafín González desde Marrakech para ‘Informativos Telecinco’.

“Muchos nos decían esta mañana que tienen el vuelo programado para esta tarde o para mañana que las compañías los están poniendo en lista de espera para poder hacer el check in y la facturación”, ha añadido.

Por su parte, “desde el consulado también están desbordados intentando ayudar a que los españoles vuelvan a casa. Justo a las 14 salía un vuelo hacia Zaragoza con plazas subvencionadas para la embajada, sobre todo para los españoles que están en las zonas más devastadas”.

Mientras tanto, dos días después del devastador terremoto, los turistas españoles no pueden olvidar el susto. Una de ellas, Olga, recuerda “muchísimo miedo, todo el mundo gritando, corriendo, porque claro no sabíamos que era. Pensábamos que era un atentado, una bomba …”

Algunos duermen con la mochila preparada por si “hay una réplica, en seguida salir corriendo”. Otros no se atreven a entrar en las habitaciones de sus hoteles. ”He dormido en el jardín”, dice un hombre.

Hay quien ha intentado adelantar su vuelo, pero sale muy caro. “Mil y pico euros el vuelo, 23 horas de viaje…”, señala un grupo de tres amigas.

En Marrakech, museos y muchos restaurantes han cerrado y muchos turistas deambulan por las calles destruidas dejando pasar los días hasta su vuelta. Siguen demandando información. “Por lo menos que nos dieran información. No ha habido ningún tipo de información”, denuncia una mujer.

Las excursiones al Atlas también se han cancelado y han cambiado planes. “He venido prácticamente a subir a la montaña y nada ahora a hacer turismo aquí en Marrakech…”, comenta un hombre.

Los que han logrado volver hoy a España siguen en shock. “Fuimos abrazando a todos, yo buscando a mi hija”, expresa una mujer, que recuerda el “interminable” momento del temblor.

Otro grupo de chicas aterriza aliviadas porque un día antes del terremoto estaban en una de las aldeas del Atlas que hoy están destruidas. “Si hubiéramos estado allí una noche antes, y nos hubiera pillado antes, probablemente no estaríamos aquí”, dicen.

Es el regreso de un viaje que no olvidarán nunca.