Desde que dejó la Casa Blanca, Donald Trump solo ha visitado Washington D.C. en una ocasión. Allí ha sido citado este jueves para comparecer ante un tribunal federal tras ser imputado por, presuntamente, intentar revertir el resultado de las elecciones presidenciales de 2020. La jueza Moxila Upadhyaya leerá los cargos al expresidente de Estados Unidos. Fuertes medidas de seguridad se han desplegado en la capital. La comparecencia está prevista a poca distancia del Capitolio, el símbolo de la democracia estadounidense que seguidores de Trump asaltaron aquel fatídico 6 de enero de 2021, al negarse a aceptar los resultados electorales que daban la victoria a Joe Biden.
Trump está citado a las cuatro de la tarde hora local (diez de la noche en la España peninsular). En esta ocasión, se enfrenta a cuatro cargos: conspiración para defraudar a Estados Unidos, para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración contra derechos.
Es la tercera imputación del exmandatario estadounidense en cuatro meses. Hasta ahora, esto no parece pasarle factura en su deseo de volver a convertirse en presidente. Es el favorito entre los republicanos para ser candidato del partido a la Casa Blanca en las elecciones del próximo año. Los sondeos vaticinan, además, que una supuesta batalla final entre Trump y Biden estaría muy reñida.
El día anterior a esta comparecencia, Trump agradecía -desde su club de golf de Bedminster, Nueva Jersey- el respaldo de seguidores. "Nunca antes había tenido tanto apoyo en nada", expresaba en su plataforma Truth Social.
De momento, Washington se ha blindado ante la cita en la que se procede a la última acusación formal contra el expresidente. Se han colocado barreras de metal fuera del juzgado y se han levantado estructuras similares alrededor de los edificios del Capitolio.
El día anterior, la policía tuvo que evacuar un edificio del Senado tras una falsa alarma de un tiroteo. También se ha aumentado la protección de los magistrados involucrados en el caso, según informaciones locales.
En la vista de este jueves, la jueza (nombrada en su día por el expresidente Barack Obama) escucha los argumentos de los fiscales y de la defensa. Posteriormente, podría definir las condiciones para que Trump quede en libertad; no se espera que este sea arrestado. Como ha ocurrido en otras ocasiones, él se declarará no culpable. Aunque se espera su asistencia, tendría la opción de comparecer por videoconferencia.
Trump siempre ha calificado los procesos judiciales contra él como una "caza de brujas". El exmandatario ha llamado al fiscal especial Jack Smith "trastornado". Smith ha pedido un "juicio rápido".
La acusación mantiene que, tras perder las elecciones del 3 de noviembre de 2020 , el entonces presidente Trump se lanzó a una conspiración para "revertir los resultados legítimos de las elecciones presidenciales de 2020". Esto incluyó falsas denuncias de fraude electoral, entre otras cosas.
La actitud de Trump desembocó, según la acusación, el los disturbios del 6 de enero, cuando una turba de sus seguidores tomó el Capitolio para intentar evitar la confirmación del triunfo de Biden.
La acusación de intentar alterar los resultados electorales de 2020 ha sido la tercera imputación para el magnate. Antes, lo fue por otros dos temas:
Trump podría enfrentarse a una cuarta imputación en Georgia, por intento de pucherazo electoral en ese estado.
Pese a todo, la ley no le impediría concurrir a las elecciones presidenciales de 2024, tal y como él desea.