Una Nintendo Switch, clave para rescatar a una niña secuestrada y abusada por un pedófilo en Estados Unidos
Las conexiones a internet de una Nintendo Switch de una niña que había sido raptada por un pederasta en Estados Unidos fueron esenciales para rescatarla
La menor habría sido coaccionada y abusada después de conocer al depredador por redes
Un pedófilo secuestra a una niña y la lleva a casa metida en una maleta para convertirla en su ‘esclava sexual’ en Brasil
Una niña de 15 años en Estados Unidos que fue raptada y violada por un hombre que conoció en redes sociales en agosto de 2022 pudo ser localizada gracias a las conexiones que realizó en su cuenta de juegos de Nintendo Switch.
El secuestrador, Ethan Roberts, de 28 años, viajó desde el Estado de Arizona hasta Virginia para engañar a la menor y llevársela con él. Durante dos semanas, la sometió a abusos sexuales y le obligó a vender imágenes íntimas a desconocidos.
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La niña pudo acceder a su cuenta de Nintendo Switch, que el agresor le había permitido llevar, y comprar juegos en Amazon. Una amiga suya se percató de que su nombre aparecía en la actividad de la Switch y avisó al FBI.
Rastrearon la localización de la menor gracias a su consola
Los agentes contactaron con Nintendo, quienes les facilitaron la dirección IP de la conexión a Internet usada por la niña. De este modo, pudieron rastrear su ubicación y rescatarla a más de 3.000 kilómetros de distancia de su hogar, según informaciones del portal de noticias peruano RPP.
Roberts fue detenido y se declaró culpable de cuatro delitos, entre ellos captación de menores en línea, transporte de menores y recepción de pornografía infantil. Fue condenado a 30 años de cárcel el pasado abril. La familia de la niña ha expresado su alivio por tenerla de vuelta.
En esta era hiperconectada, se hace harto necesario enseñar a nuestros hijos cómo navegar por la web responsablemente. Por ello, aconsejamos hablar con ellos sobre los beneficios y riesgos de Internet; explicarles que no deben compartir información personal, fotos o vídeos con extraños; o usar controles parentales para bloquear el acceso a sitios web inapropiados o peligrosos.