Un niño de 11 años acudió por su cuenta a una comisaría en Mar del Plata, Argentina, para pedir auxilio por parte de las autoridades, tras haber sufrido reiteradas agresiones físicas por parte de su madre.
Los agentes de policía constataron que el menor presentaba varios signos físicos de violencia, como golpes en el cuerpo, y se encargaron de protegerle hasta que lograron ponerse en contacto con los encargados del departamento de protección infantil argentino, el área de la niñez, quienes lo llevaron a la Sala de Salud de Playa Serena. Fue en el centro médico donde se pudo confirmar que el niño había sido víctima de maltrato físico.
Posteriormente, la madre del menor, al acudir a esa misma estación de policía visiblemente agitada, fue detenida en el acto por los agentes que se encontraban allí. Según el diario argentino La República, la mujer estaba buscando a su hijo, que se habría escapado.
La mujer se encuentra bajo custodia de la Fiscalía de Flagrancia y del Juzgado de Familia local, y también se espera que los responsables del área de la niñez del municipio se involucren en el caso.
Se trata de un caso más de violencia de progenitores a hijos, que recuerda al episodio vivido en Logroño hace tan solo unos días, en el cual uno de los tres hijos del padre que asesinó a su pareja logró escapar cuando éste intentó ahogarle en un río.