Mathew James Hicks es un hombre de 34 años que reside en Aberdeen, Escocia. El pasado mes de marzo tenía fiebre y decidió tomar paracetamol. Su mujer, Rachel, terminó llamando a los servicios sanitarios al ver que Mathew se encontraba bastante aturdido, informa el diario local 'Daily Record'.
Hicks fue trasladado en ambulancia hasta el Hospital Aberdeen Royal Infirmary. Los primeros exámenes arrojaron el severo diagnóstico: una sepsis (respuesta fulminante del organismo a una infección), estreptococo A (bacterias en garganta y piel) y neumonía en el pulmón derecho, según recoge 'La República'.
"Nos sentimos muy aliviados cuando nos dijeron que Mathew se había recuperado, pero luego nos dieron malas noticias sobre la amputación", manifestó Rachel. A principios de este mes de junio, Hicks recibió el alta hospitalaria tras 12 semanas ingresado.